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05/05/2022 Pete Reed: Una lesión, un SkiErg y un objetivo
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#NotLyingDown (que podría tradaucirse como #NoQuedarseTumbado) es el eslogan omnipresente en la cuenta de Instagram del remero británico y triple campeón Olímpico, Pete Reed. Esta consigna describe de forma acertada la perseverancia implacable de Reed a través de todos los contratiempos de la vida, incluido el más reciente, un derrame cerebral.

En septiembre de 2019, Pete Reed acababa de retirarse del remo competitivo de élite. Uno de los atletas Olímpicos más laureados de Gran Bretaña, ganó la medalla de oro en tres Juegos Olímpicos consecutivos y fue famoso en los tests físicos por tener la mayor capacidad pulmonar registrada a ningún deportista en el mundo.

Después de abandonar el remo, Reed regresó al ejército británico, a la Royal Navy, a la que se había incorporado a la temprana edad de 18 años. Fue entonces donde descubrió el remo por primera vez. A la edad de 19 años, registró el tiempo más rápido en el Royal Navy Rowing Championship; era la primera vez que se montaba sobre el RowErg, la máquina de remo.

Recientemente, al retornar al ejército, durante el entrenamiento naval, Reed comenzó a sentirse mal y fue al hospital donde sufrió un derrame cerebral en el medio de la columna. Esta afección es extremadamente rara y los médicos no están seguros de qué la causó. Pete Reed quedó paralizado del pecho para abajo. Sin embargo, el laureado atleta Olímpico estaba decidido a recuperarse de la mejor manera posible.

El primer paso fue comenzar la rehabilitación, donde Reed comenzó a recuperar su fuerza. ¿Una de las herramientas a su alcance?: el SkiErg. “Al comenzar la rehabilitación, supe que quería probar el SkiErg”, dice Reed. “Había varias razones. Conocía el patrón de movimiento, sabía que podía hacerlo. Para mí es importante que sea muy accesible, que pueda subirme con mi silla de ruedas y luego simplemente agarrar las empuñaduras, tirar y listo”. No es fácil sacar al atleta competitivo de alguien como Reed y, en consecuencia, se hizo un plan. Comenzó con pequeños incrementos.

Pete Reed (derecha), entrenando en el SkiErg. 

“Cuando llegué por primera vez a rehabilitación hice 20 minutos en el SkiErg y fue bastante duro. Me senté en un banco, no en la silla de ruedas. De vez en cuando, me dejaba caer hacia atrás para tumbarme un poco en el banco, ya que en ese momento de mi rehabilitación todavía no tenía suficientes músculos centrales, suficiente “core”, ni siquiera para sentarme erguido”, dice. Lentamente aumentó a 30 minutos, luego a 45.

Reed tiene cuidado al señalar que el progreso es una cuestión de cómo te mides a ti mismo. “Es muy importante que no te compares con cómo solías estar. Es muy importante que te compares con cómo estabas ayer. Y trabajar duro para ser un poco mejor mañana”, dice Reed. Continúa con un ejemplo: “Antes, solía ​​​​sentarme y entrenar cómodamente en la máquina de remo a un parcial de 1:45. Si estuviera comparando mis parciales actuales de 2:30 con los 1:45 que marcaba antes, dejaría de subirme a la máquina. Estaría triste y deprimido porque ya no puedo hacerlo y no soy lo suficientemente bueno y todos esos pensamientos negativos. Pero en realidad, si estás agradecido por lo que lograste y eres realista al respecto, debes que cambiar las reglas del juego. De repente, empiezas a comprarte con ayer y con ese parcial de 2:30 que hiciste ayer…  y cuando ves que hoy vas a 2:29, te sientes genial”.

Mientras Reed describe su rutina de entrenamiento y los parciales que iba logrando, también recuerda la familiaridad del Monitor de Rendimiento PM5. “El PM5… yo crecí mirando esa pantalla y estoy muy familiarizado con los números, con los parciales y todas las configuraciones, por lo que aunque parezca raro es una especie de consuelo. Es un verdadero consuelo volver a subirse a esa máquina y poder hacer ejercicio. Estoy muy, muy agradecido por ello”, dice. Y la máquina tiene muchas otras ventajas. Particularmente su nivel de accesibilidad y facilidad de uso. Para alguien como Reed, con una lesión muy importante, elimina otra barrera para hacer deporte. “Eso es realmente importante, en todos los deportes, eliminar esa barrera que existe entre ese tú que está tumbado en el sofá, armarse de valor para ir a hacer ejercicio y finalmente ponerse a ello. Si no hay barreras, puedes ir y hacerlo con bastante facilidad y eso es lo que me gusta del SkiErg, que no hay barreras, simplemente te subes, agarras las empuñaduras y listo”.

Reed ya estaba familiarizado con el SkiErg antes de la lesión. Él y sus compañeros del Equipo Británico de Remo usaban la máquina para entrenar cuando estaban lesionados, especialmente si la lesión era en las extremidades inferiores. “Hubo maravillosos ejemplos de mis compañeros de equipo a lo largo de ese tiempo, que hacían media temporada en el SkiErg en lugar de en la máquina de remo (RowErg), y luego terminaban la temporada con algunos de los mejores resultados que nunca habían obtenido sobre la máquina de remo”, dice Reed. “Así que siempre ha sido una muy buena herramienta para mantener a tope el corazón y los pulmones”.

“Desde entonces ya sabía que era bueno. Y ahora que he sufrido esta gran lesión, estoy de vuelta trabajando en el proceso”, continúa Reed. Dice que por suerte todavía tiene fuerza en los brazos, los hombros y los dorsales. “Como todavía tengo mis dorsales y obviamente estoy en posición de sentado, todavía sigue siendo un grupo muscular bastante amplio para entrenar. Lo que significa que realmente puedo hacer un gran ejercicio pulmonar y pegarme una buena sudada, mientras que todos los otros grupos musculares que me quedan son mucho más pequeños, por lo que los músculos tienden a agotarse antes de que mis pulmones se queden sin aliento. Por eso el SkiErg ha sido tan importante para mí. Y también en el aspecto emocional”, dice.

Si bien Reed dice que la práctica del remo aún no está del todo descartada para él, prefiere mirar hacia adelante, no hacia atrás. Tratando de ser un poco mejor que ayer, paso a paso, tratando de progresar.  El ex atleta Olímpico no se quedará tumbado.